Entre todas las regiones de bosque ecuatorial, la zona fronteriza entre Ecuador, Colombia y Perú es una de las más ricas en biodiversidad. Allí también se encuentra el parque nacional de Yasuní entre los ríos Napo y Curaray. El parque fue declarado por la UNESCO como Reserva de Biósfera en 1989. Desde que el gobierno ecuatoriano autorizó la explotación de los yacimientos de petróleo, ha aumentado enormemente la tala de amplias superficies de bosque tropical. La población indígena del lugar ha quedado completamente desamparada. La deforestación, además de otros atentados contra este ecosistema frágil, ha destruido sus terrenos de caza y, por consiguiente, su medio de subsistencia. Las estructuras tradicionales de las comunidades indígenas están a punto de ser destruidas.

La situación se ha recrudecido, además, por los conflictos entre los diferentes clanes y tribus exasperados, pues desde el inicio de la explotación petrolera, el espacio vital de estas poblaciones se ha reducido al 5% de la superficie original.

Una biodiversidad única, la cultura indígena y los productos únicos del bosque húmedo tropical amazónico configuran el potencial de la región y representan la situación inicial para el proyecto Choco Samona de Cuisine sans frontières.

Choco Samona es un concepto de desarrollo integral para la provincia de Orellana al lado del Rio Napo. Ofreciendo una formación práctica, el proyecto apoya a los habitantes indígenas a utilizar sus propios recursos y, basado en ello, a construir nuevos medios de subsistencia.

En 2017 la comunidad de Samona recibió dinero para la infraestructura de una fábrica de chocolate. Esta fábrica está intacta, pero raramente usada por falta de conocimiento. Los pocos productos de cacao que se producen allí son de calidad muy baja. Y en este punto Cuisine sans frontières entra en acción:

Durante un tiempo de doce meses los miembros de la cooperativa Choco Samona reciben una formación continua por medio de cursos prácticos. La primera parte trata del cultivo de cacao y del mantenamiento de las plantaciones y de las plantas. Luego siguen cursos sobre la producción de chocolate: la fermentación, el secado, la torrefacción, la trituración, el conchado, el templado, el amasado, la colada. En cuanto exista el producto final, se apoyará a la cooperativa a distribuir el chocolate.

El chocolate puede comprarse en Changemaker, Bachsermärt y Schwarzenbach, en Zúrich, o pedirse a través de los proyectos colectivos de Gebana.

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